Signatura: | L21354 |
Fecha: | 1931-06-10 |
Tipo de documento: | Prensa |
Idioma: | Castellano |
Fuente: | Ion Urrestarazu Parada |
Descripción: | CAPITULO DE SUCESO / La Voz de Guipúzcoa, p. 7 |
Observaciones: | "CAPITULO DE SUCESO UN MUERTO EN ACCIDENTE DEL TRABAJO Ayer tarde ocurrió un mortal accidente del trabajo en la Herrera, del que resultó víctima el obrero Emilio Beltrán Leunda, de 27 años, empleado en la linternería de Daniel Antía, de Pasajes de San Pedro. El infortunado obrero se encontraba pintando unas persianas en el tercer piso de la casa "Zoriontegui", de la Herrera, y según nos comunican, al apoyarse en la cornisa de la ventana, cedió ésta y perdiendo el equilibrio fué a caer al patio de la casa. Recogido inmediatamente por sus compañeros de trabajo y algunos vecinos, fué subido al segundo piso de dicha casa, donde, reconocido por el médico de la villa, no pudo hacer otra cosa que certificar la defunción del infortunado obrero. Personado el Juzgado de Alza, ordenó el levantamiento del cadáver. La desgracia ocurrió a las tres y media de la tarde. La víctima, deja mujer y dos hijos." |
Grupos: | Crónicas de La Voz de Guipúzcoa del año 1931 |
Comentarios / Correcciones |
Signatura: | L21354 |
Fecha: | 1931-06-10 |
Tipo de documento: | Prensa |
Idioma: | Castellano |
Fuente: | Ion Urrestarazu Parada |
Descripción: | CAPITULO DE SUCESO / La Voz de Guipúzcoa, p. 7 |
Observaciones: | "CAPITULO DE SUCESO UN MUERTO EN ACCIDENTE DEL TRABAJO Ayer tarde ocurrió un mortal accidente del trabajo en la Herrera, del que resultó víctima el obrero Emilio Beltrán Leunda, de 27 años, empleado en la linternería de Daniel Antía, de Pasajes de San Pedro. El infortunado obrero se encontraba pintando unas persianas en el tercer piso de la casa "Zoriontegui", de la Herrera, y según nos comunican, al apoyarse en la cornisa de la ventana, cedió ésta y perdiendo el equilibrio fué a caer al patio de la casa. Recogido inmediatamente por sus compañeros de trabajo y algunos vecinos, fué subido al segundo piso de dicha casa, donde, reconocido por el médico de la villa, no pudo hacer otra cosa que certificar la defunción del infortunado obrero. Personado el Juzgado de Alza, ordenó el levantamiento del cadáver. La desgracia ocurrió a las tres y media de la tarde. La víctima, deja mujer y dos hijos." |
Grupos: | Crónicas de La Voz de Guipúzcoa del año 1931 |
Comentarios / Correcciones |
|
|